Os traigo un cuento de 2005 que yo descubrí en la Feria del Libro de 2009 en el parque del Retiro de Madrid y se lo compré a mi sobrino que por aquel entonces tenía 2 añitos. Es ¡Beso, beso!, de la autora Margaret Wild y la ilustradora Bridget Strevens-Marzo, editado por Ekaré.
Es un cuento tierno y sencillo, perfecto para los y las más chiquitinas. Tiene todos los ingredientes que gustan y atraen a las criaturas pequeñas: ilustraciones bonitas, personajes que son animales, poco texto fácil de entender y una estructura repetitiva.
¿Por qué las estructuras repetitivas tienen un atractivo especial para las niñas y los niños? Pues entre otras cosas porque: 1) les permiten predecir y anticipar lo que vendrá a continuación, 2) les posibilitan una participación más activa en la historia, 3) les confieren cierto sentido de estabilidad y seguridad, 4) conllevan un ritmo y una musicalidad muy reconfortantes para las criaturas.
Por todo lo anterior, esta obrita es un acierto para los y las peques y no tan peques. Con 4 años y medio que tienen, mis hijos me piden muy a menudo que se la lea y la disfrutan más ahora que de más chiquitos. A veces en las cosas más sencillas es donde más belleza encontramos y creo que eso es lo que ocurre con ¡Beso, beso!
Este precioso cuento narra las andanzas de un Bebé hipopótamo que una mañana tiene tanta prisa por ir a jugar que olvida darle un beso a su mamá. Así empieza esta adorable historia en la que acompañamos a Bebé hipopótamo en su viaje de ida y regreso con su mamá.
Edad recomendada- A partir de 1 año

Eva H. Hernanz
Madrid
contacta@mamaevapsicopedagoga.com





