Publicado en A partir de 2 años, Recomendaciones, Reseñas literarias

Otoño

El último cuento que os traigo por esta temporada, relacionado con esta estación, es Otoño de Gerda Muller, editado por Ing Edicions. Como el primero de esta triada de cuentos seleccionados para trabajar el otoño (¿Qué sabes de…? El otoño), forma parte de una colección de cuatro en la que hay un libro por estación.

Se trata de un libro sin texto en el que las ilustraciones son un verdadero gustazo. Son imágenes atemporales y eso que ya tienen unos cuantos añitos… Llamadme clásica, pero me encantan porque son ese tipo de dibujos como “de toda la vida”, que no pasan de moda, realistas pero infantiles a la vez y con bonitos colores. Vamos, para las que tengáis ya una edad como yo, que te transportan a tu infancia. Y eso siempre es un plus a la hora de elegir un libro infantil, ¿o no? Y a su vez, como trata del otoño, me ha recordado cierta parte de mi infancia en Asturias: su olor, el amagüestu asturiano, las castañas asadas, la sidra dulce…

Otoño. De Gerda Muller
Otoño, de Gerda Muller

A lo largo del cuento se plasman variadas escenas, muchas de ellas concernientes a la naturaleza, relacionadas con diferentes actividades que se realizan en otoño: pisar charcos, recoger frutos del otoño, caminar bajo la lluvia, jugar con hojas secas, volar cometas, hacer mermelada de moras… Todas ellas están muy cuidadas y con multitud de detalles. Esto último, sumado al hecho de que no hay que ceñirse a un texto concreto, facilita, como comentábamos en la entrada anterior, el abordaje de multitud de cuestiones diferentes con cada ilustración y contribuye al desarrollo de la curiosidad, la imaginación y la creatividad. Además, este tipo de cuentos facilitan también el desarrollo de habilidades lingüísticas y la adquisición de vocabulario.

El libro es enteramente de cartoné, su tamaño es muy manejable sin ser pequeño y sus esquinas son redondeadas, por lo que resulta muy adecuado para ser utilizado por las y los peques y transportarlo a cualquier parte. Nosotros hemos comenzado por Otoño, pero seguro que completaremos toda la colección.

Edad recomendada- A partir de 2 años.

Eva H. Hernanz

Madrid

mamaevapsicopedagoga@gmail.com

Publicado en A partir de 4 años, Recomendaciones, Reseñas literarias

Las estaciones

Este libro editado por Kalandraka y perteneciente a Iela Mari, autora del conocido Globito rojo (uno de mis imprescindibles para la etapa de infantil), aborda de manera sencilla pero eficaz el paso de una estación a la otra. Esta autora es conocida por crear libros sin texto que narran originales historias, mostrando procesos o secuencias con un diseño minimalista, colorido y muy efectivo. Sus obras suelen crear impacto en las criaturas, resultando ser excelentes experiencias visuales.

Las estaciones es una historia circular que, ciertamente, no aborda sólo el otoño, aunque es igualmente valiosa para trabajar la época en la que estamos. A través de unas imágenes sin texto que hablan por sí solas, el libro nos permite adentrarnos en conceptos como las estaciones, el ciclo de la vida y otros tan complejos para los y las más peques como el paso del tiempo.

Cada página nos muestra un mes del año y una escena diferente que ocurre alrededor de un gran roble, sus «habitantes» y sus «vecinos». Comenzamos el viaje en invierno y vamos observando el cambio de la flora y la fauna a lo largo de la primavera, el verano, el otoño y de nuevo el invierno.

Las ilustraciones son sencillas pero bellas, realistas, fáciles de entender y con contrastes de colores, especialmente de unas estaciones a otras. Lo más destacable, a mi entender, es que esta obra cede un buen espacio a la imaginación e inventiva infantiles y que se hace entender si necesidad de emitir una sola palabra. Será deformación profesional, pero para trabajar conceptos básicos me gusta utilizar ilustraciones sin apoyo textual y dejar que sean los propios niños y niñas quienes describan lo que ven. Los adultos debemos intervenir sólo para preguntarles, ayudarles o guiarles hacia las nociones que nos parecen importantes, si es que no salen de forma espontánea. También es interesante observar cómo las mismas imágenes pueden suscitar diferentes interpretaciones o conversaciones de un día a otro y cómo en diferentes días los críos y crías se fijan en distintos detalles de las mismas.

Edad recomendada- A partir de 4 años.

Eva H. Hernanz

Madrid

mamaevapsicopedagoga@gmail.com